El avance tecnológico ha permitido al campo de la medicina, en este caso los rayos X, generar grandes avances, como lo es la toma de radiografías de manera digital, permitiendo una mejor calidad e inmediatez en la obtención de resultados, mediante el uso de un sensor que captura y almacena la imagen en un ordenador.
Radiografía convencional VS radiografía digital.
La radiografía convencional se basa en la interacción de los rayos X con el tejido u órganos en cuerpo humano, durante este proceso, los rayos emitidos son absorbidos por el organismo, mientras que algunos logran atravesar (las distintas partes del cuerpo como huesos, órganos y distintos tejidos absorben de manera diferente la radiación), llegando de esta manera a una película que al ser impresa, da como resultado una imagen radiográfica, en la cual se pueden observar la estructura de interna del cuerpo en una escala de grises, conocidas también como densidades radiológicas.
La radiografía digital atraviesa el mismo proceso que la convencional, en cuanto al uso de rayos X y de su interacción con tejidos y órganos, la diferencia se encuentra en la obtención de la imagen, ya que en este caso, no es necesario disponer de una película para realizar una impresión y posteriormente pasar por un proceso de revelación. En este caso, los rayos X son capturados por una placa de circuitos sensibles a la radiación, los cuales generan una imagen que posteriormente es enviada a un ordenador.
Ventajas de la radiografía digital
Como se mencionó anteriormente, sus principales ventajas son la calidad de imagen, siendo esta muy superior a la convencional, además que dicha imagen puede ser ampliada, dando una mejor lectura al momento de realizar diagnósticos, permitiendo mayor efectividad.
Adicionalmente se cuenta con la inmediatez de los resultados, evitando largos tiempos en la obtención de la imagen.
También hay que tener que cuenta que la exposición ante la radiación es reducida, en comparación a la toma de la radiografía convencional, teniendo como resultado la disminución de riesgos para el paciente.
Como una desventaja se podría tomar la inversión a realizar, ya que se trata de equipos de alta tecnología, sin embargo se debe tener en cuenta los beneficios que estos equipos brindan, no solo a personal médico, sino también al paciente.